El enigmático objeto interestelar 3I/ATLAS, que ha mantenido en vilo a la comunidad astronómica por sus características atípicas desde su detección en julio, alcanzó su perihelio (punto más cercano al Sol) el 29 de octubre de 2025.
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Este fenómeno se considera un hito de observación crucial, ya que el comportamiento del objeto durante este paso puede ofrecer pistas definitivas sobre su verdadera naturaleza.
El evento clave: Perihelio confirmado
Según múltiples reportes y datos astronómicos, el perihelio se concretó el 29 de octubre, situando al 3I/ATLAS a una distancia aproximada de 1.356 millones de kilómetros del Sol (alrededor de 1.356 unidades astronómicas).
Lo que la ciencia esperaba en este punto:
- Máxima Actividad Cometaria: El calor extremo del Sol debería provocar la máxima sublimación de hielos en el núcleo del objeto. Esto se traduce en una mayor liberación de gases y polvo, aumentando significativamente el tamaño y brillo de su coma y cola. Reportes indican que, efectivamente, el brillo del cometa aumentó exponencialmente a medida que se acercaba.
- Máxima Velocidad Orbital: En el perihelio, el 3I/ATLAS alcanzó su velocidad orbital más alta, siguiendo su trayectoria hiperbólica que lo sacará permanentemente del Sistema Solar.
El “Test de Propulsión” de Avi Loeb
El evento del perihelio fue particularmente crucial para el astrofísico de Harvard, Avi Loeb, quien ha mantenido la hipótesis de que el 3I/ATLAS podría ser un artefacto tecnológico, en lugar de un cometa.
Loeb señala que el paso del objeto cerca del Sol, cuando estaba temporalmente oculto tras el resplandor solar (en conjunción), ofrece el momento de mayor eficiencia para que una posible nave con propulsión controlada ejecute una maniobra de aceleración o frenado (el denominado Efecto Oberth).
El argumento central es que si el objeto es tecnológico:
“Las próximas 24 a 48 horas [después del perihelio] lo definirán todo. Si el objeto cambia de rumbo de forma inexplicable, significará que no estamos ante un cometa, sino frente a una tecnología no humana.”
¿Cuál es el estado actual de la observación?
Actualmente, la comunidad científica se encuentra en un periodo de espera y vigilancia:
- Visibilidad Nula: Debido a su proximidad al Sol, el 3I/ATLAS no es visible con telescopios terrestres en este momento. Esta condición de ocultación temporal finaliza a medida que el objeto se aleja de nuestra estrella.
- Próxima Reaparición: Los astrónomos esperan que el objeto reaparezca en el cielo, visible con telescopios potentes, a partir de finales de noviembre y en diciembre.
- La Incógnita Pendiente: El principal objetivo ahora es trazar con precisión milimétrica la trayectoria del 3I/ATLAS al reaparecer. Si esta trayectoria se alinea perfectamente con la esperada para un cometa natural, la hipótesis de Loeb se refutaría. Cualquier desviación anómala, no explicable por la desgasificación normal de un cometa, mantendría abierta la especulación tecnológica.
- Sin Amenaza: Las agencias espaciales han reiterado que, independientemente de su origen, la trayectoria del 3I/ATLAS no representa ninguna amenaza de impacto para la Tierra.
El paso por el perihelio fue el punto culminante de la actividad del 3I/ATLAS; el análisis de su comportamiento posterior es lo que determinará el próximo capítulo en el debate sobre este singular visitante interestelar.